CIRCE, MALDITA
XI.
-Aquí
Ahora...
Bésame.
Ahora...
Bésame.
(silencio)
- Pero tu no sabes...
Soy Circe, estoy maldita.
-¿Maldita?
Acaso no es maldición
amaros y no poder ni siquiera rozaros.
Tengo el pecho abierto...
Soy una herida
que se repudia así misma,
despreciando su propia unión de piel.
(silencio)
- No puedo...
No soportaría ver de nuevo el efecto
de mi veneno.
Serás bestia...
Esa mirada, que ahora refleja deseo y ternura,
se transformará en un abismo oscuro
y sin alma.
Y tu voz...¡tu voz!
tan sólo será un gemido lastimero
rasgando ecos en una noche
que no se acabará, no tendrá fin...
- ¡No me importa!
Ya estoy muerto...
Así que...bésame.
Soy tu reflejo.
Beatriz Cáceres,
Bellisimo post.. completo con una magnifica foto, unos versos digno de ti y una musica que me llevo muy lejos
ResponderEliminarMe alegro volverte a leer Beatriz
Un beso
Isa
Preciosa Isa muchas gracias por ser tan generosa. Ando un poco perdida ultimando mi novela, que por alguna extraña razón en algunos pasajes se me resiste.
ResponderEliminarBueno, decirte que la historia de Circe dentro de la Odisea me sedujo desde la primera vez que lo leí. Su personaje es absolutamente devastador hasta con ella misma, pero demuestra al final que es capaz de sentir amor, cuando lo deja marchar y no sólo eso, sino que le indica por lo menos dos caminos para hacerlo...Eso sin lugar a dudas es amor y del bueno.
Me pasaré por tu blog. Gracias mil gracias por todo.
Tienes el alma preciosa. Te abrazo.
Conviertes la mitología en belleza.
ResponderEliminarTu creatividad es hermosa.
Besos.
Un beso, Toro.
ResponderEliminarPrecioso Beatriz, parece un rodaje por tomas, cada estrofa es un poema, te felicito!
ResponderEliminarGracias por tu lectura.
EliminarUn saludo.
Una tragi-comedia como la vida misma.
ResponderEliminarMe gustó ese conversarse y responderse in vivo.
Me gusta lo que escribes y cómo lo dices.
Cordiales saludos desde Quebec.
Eres muy amable, gracias.
EliminarEsa es precisamente la razón de escribir..poder emocionar.
Un abrazo